Mr. Hide Seeds® tiene el placer de presentaros nuestra nueva genética: MR. Big Candy. Un híbrido de clara predominancia índica y con propiedades medicinales de gran notoriedad.
Es tan relajante y alivia tanto el estrés, que su consumo se puede considerar como pura homeopatía sin efectos adversos. No es de extrañar, teniendo en cuenta sus formidables ancestros: Mendocino Purple Kush X Big Bud; dos súper índicas cuya calidad está más que testada.
Produce grandes cogollos de un delicado color púrpura, cuyos pelos son de tono ámbar. Todo ello repleto de la resina más pegajosa que puedas imaginar. Es tan extraordinaria su producción de tricomas que parecen helados de caramelo. Por ese motivo, Mr. Hide Seeds la ha bautizado, en castellano, con el nombre de Gran Caramelo.
Muy dulce, tanto en fragancia como en sabor, nuestra Mr. Big Candy es lo más parecido a paladear un caramelo afrutado. Si deseas sacarle todo su potencial, tanto en relación a su efecto, como a sus delicias organolépticas, utiliza alguna de nuestros dispositivos Mr. Hide Extracts® para realizar tu propio BHO o Rosin.
Resumiendo sus efectos podemos decir que:
Está considerada como una de las genéticas más relajantes que existen y muy adecuada para abandonar adicciones a las benzodiacepinas y otras drogas legales que nos prescriben en la medicina convencional con gran potencial adictivo. ¿Para qué engancharte a drogas que, aunque legales, son muy nocivas? Consume una buena cantidad de nuestra Mr. Big Candy antes de irte a la cama y verás cómo duermes. Y verás cómo te despiertas sin resaca química.
A pesar de su capacidad relajante, también es de efecto euforizante que nos deja una gran sensación de felicidad.
Además de sus propiedades medicinales, consumida en crudo (Raw Cannabis), nuestra Mr. Big Candy está considerada como “super food”; uno de los mejores complementos alimentarios naturales que existen.
Pausadamente, pero sin vuelta atrás, comienza a recorrer nuestra mente y cuerpo, minutos después de la primera calada. Poco a poco comienzan a producirse las primeras distorsiones visuales y auditivas que tan placenteras resultan a los que amamos esta planta.
Nuestra percepción del tiempo se ralentiza. Normalmente el “high” es introspectivo y muy creativo. Una genética perfecta para dedicarnos a proyectos creativos, reuniones con amigos o, simplemente, tumbarse a ver la TV. Pero conforme va pasando el tiempo, los efectos más narcóticos de su ascendencia índica comienzan a predominar; ha llegado el momento del total relax.
Su morfología es típicamente cónica, como de abeto de navidad, con grandes cogollos laterales que envuelven un súper cogollo central. No es de las más productivas, pero en buenas condiciones de cultivo, nos proporciona fácilmente los 500 gramos por metro cuadrado en interior. Adecuadamente curada, puede alcanzar hasta un 19% de THC.
Nuestra Mr. Big Candy es un regalo para la vista, la mente y el paladar.