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Big Bud ha tenido por mucho tiempo fama de variedad de cannabis con rendimiento asombroso. Menos conocido es el hecho que su óptima herencia Indica ha sido cuidadosamente refinada y continuamente mejorada en el correr de los años.
El desarrollo primario de Big Bud ocurrió en los Estados Unidos, antes que en los años ochenta la variedad fuera traída a Holanda en busca de asilo político. Cuando se intensificó la Guerra a las Drogas, cultivadores pioneros norteamericanos temieron perder variedades de ganja irremplazables que significaban años de trabajo, estudio y dedicación. Muchos genotipos únicos y muy apreciados fueron llevados a los Países Bajos para asegurar que no se perdieran para siempre.
La Big Bud primaria era una Afgana robusta engendrada con genes de Skunk, un híbrido de vigor inusual e inesperado, con una producción que rompía todos los cánones. Distribuida en forma de clon, Big Bud rápidamente se convirtió en una variedad comercial popular. Cuando aquellos clones originales viajaron a Holanda, fueron la base para varias variedades estables, incluyendo cruzas con Skunk #1 y un híbrido muy popular de 75%BB-25%NL#1. Dos desarrollos importantes hicieron posible la variedad corriente y premiada de Big Bud. En primer lugar, investigaciones intensivas permitieron a Sensi identificar el genotipo y origen geográfico exacto del cultivo Afgani en Big Bud. En segundo lugar, la expansión del stock de genes a comienzo de los años noventa permitió a los cultivadores de Sensi acceder a un ejemplar primario de esta variedad.
Con estas dos bases fuimos capaces de ver los orígenes de Big Bud. El híbrido final cruzado de Sensi recaptura el vigor del clon original y además se beneficia del sabor suave, afrutado, y de su enorme mejoramiento en potencia.
La enorme producción continúa siendo, naturalmente, la característica más destacada de la variedad de semillas Big Bud. Las plantas que tienen su tiempo de floración completo crecerán algo más altas y son por regla general los ejemplares de mayor rendimiento. Los tallos de Big Bud son gruesos y robustos, aunque las masas de cogollos gigantescos, dulces y brillantes pueden crecer tan pesadas que llegan a doblarlos y hasta romperlos, por lo cual las ramas más prometedoras deben ayudarse con lazos o cordeles tensados.