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Esta es una versión rápida para los verdaderos amantes de la Indica. Las semillas fueron traídas de Kabul en 1989. A lo largo de los años, se ha cultivado en el territorio de Kazajstán, Rusia y Ucrania, pero debido a los cruces caóticos y la endogamia, su calidad original ha caído en el olvido.
Sólo quedaban siete semillas de las inicialmente importadas, que se habían mantenido intactas durante más de veinte años! A pesar del pesimismo de nuestros "socios", todas las semillas brotaron. Además, pudimos recrear y estabilizar el fenotipo deseado.
El trabajo de dos años dio excelentes resultados! "Los "avezados" que recuerdan ese sabor clásico, lo reconocen a la primera bocanada - este es el verdadero afgano de la vieja escuela.
Una planta poco exigente prácticamente no necesita manicura. Tiene flores gruesas y oscuras. Al final de la floración, su aroma recuerda al hachís afgano.
Sabor dulce y afrutado. Efecto índica muy fuerte. Excelente opción para las personas que sufren de insomnio.